Nuria Cardoso se incorporó a ASEDAS en 2016, momento desde el que desarrolla la estrategia de comunicación 360º de la institución. Ha sido directora de la revista especializada en telecomunicaciones ‘Movilfonía’, y ha aportado su experiencia en el periodismo al mundo de la consultoría en proyectos de comunicación y relaciones públicas en el ámbito nacional e internacional. Su labor se ha visto reconocida con varios premios, entre los que destaca el Vodafone de Periodismo.
“El consumidor debe estar siempre en el centro de la evolución de los sistemas de información sobre los alimentos que tiene a su disposición” .
● ¿Por qué es tan necesario un etiquetado inteligente fiable en la alimentación?
El etiquetado es el principal soporte de información para el consumidor, y en materia de alimentación es especialmente relevante porque responde a cuestiones muy sensibles relacionadas, por ejemplo, con la seguridad alimentaria -fechas de consumo preferente o modos de conservación- o con la información nutricional -alérgenos y otros-. Todo ello está recogido en el Reglamento 1169/2011 sobre información alimentaria facilitada al consumidor. Si el etiquetado inteligente pretende ir más allá de las obligaciones legales para convertirse en una herramienta de información amplia al consumidor e incluso en un canal de comunicación bidireccional es, efectivamente, importante aportar el máximo rigor y responsabilidad en los datos que se compartan a través de él. Por ejemplo, existe ahora mismo un debate muy interesante sobre cómo transmitir las acciones en materia medioambiental de las empresas.
● ¿Para quién es beneficioso y por qué?
El consumidor debe estar siempre en el centro de la evolución de los sistemas de información sobre los alimentos que tiene a su disposición. Productores, fabricantes y distribuidores, siempre en estrecha comunicación con las asociaciones de consumidores, estamos muy atentos a cuáles son las inquietudes de la sociedad para intentar responder a las mismas desde los diferentes formatos de etiquetado que existen. En este sentido, debemos ser cuidadosos en presentar la información de una manera completa -por ejemplo, en la información nutricional es importante hablar de cantidades de ingesta- y, al mismo tiempo, clara y fácil de entender; además de no sobrecargar al consumidor con datos de poca relevancia o excesivamente técnicos. En este sentido, el etiquetado inteligente puede ser una oportunidad para profundizar en algunos aspectos del producto -por ejemplo, para responder a la inquietud que existe sobre la sostenibilidad medioambiental y social de las empresas-, pero también un hándicap si la información a la que da acceso no sigue unos criterios que la hagan fácilmente accesible al consumidor.
● ¿Cómo afectaría el etiquetado inteligente en la diferenciación y competitividad de las marcas más locales?
El etiquetado es, además de un elemento informativo, la tarjeta de presentación de cualquier producto frente al consumidor. Por lo tanto, un etiquetado atractivo y completo ofrece siempre buenas opciones de diferenciación. El uso de las nuevas tecnologías es un elemento que puede presentar buenas oportunidades a todo tipo de productos, incluyendo los locales o de cercanía, para profundizar en sus características, en los modos de producción o en la relación con el territorio, entre otros. Además, pueden ser una ventana hacia espacios de comercialización más amplios, más allá del área de producción.
● A nivel comunicativo, ¿cree que hace falta más divulgación para que todos los eslabones de la cadena agroalimentaria adopten el etiquetado inteligente?
La comunicación es siempre necesaria y, para ser significativa, es preciso que fluya en varias direcciones. La cadena de producción y distribución necesita saber qué tipo de información demanda el consumidor y cuáles son los canales que le resultan más útiles; y los desarrolladores tienen que presentar esta información de la manera más clara y accesible posible. En definitiva, el consumidor debe estar siempre en el centro de los procesos. En este sentido, es fundamental tener también en cuenta la variedad de clientes que consumen alimentación, cada uno con necesidades específicas (personas mayores, personas con discapacidad, personas con intolerancias o alergias, nativos digitales…) a las que hay que dar respuesta.
● ¿Qué oportunidades cree que ofrece el etiquetado inteligente a los distribuidores, autoservicios y supermercados locales?
Por nuestras tiendas pasan cada día unos 15 millones de consumidores y, por lo tanto, son puntos de encuentro muy importantes para saber cuáles son las inquietudes y necesidades de los consumidores y para proporcionarles la información que necesitan. El etiquetado es un elemento más de esta comunicación continua, en la que la digitalización está cobrando fuerza como un elemento para profundizar en la mejora del servicio al consumidor desde los datos y la accesibilidad.
● ¿Por qué es importante para ASEDAS participar en este II Congreso de Etiquetado Inteligente?
Para nosotros, el Congreso de Etiquetado Inteligente es un punto de encuentro muy importante con una gran mayoría de las asociaciones de consumidores que trabajan en España. La información que nos llega desde éstas es muy significativa para seguir evolucionando hacia un mejor servicio al consumidor, por lo que escucharlas a lo largo de las diferentes mesas de debate -que abarcan desde la alimentación saludable a la alimentación sostenible, entre otras muchas- es una fuente de inspiración y una oportunidad para transmitirles también nuestras inquietudes y avances para seguir llevándoles una alimentación completa, variada y segura muy cerca de sus casas.